Cuenta el INAH con protocolo para fincas antiguas con riesgo de colapso
Actualmente nuestra entidad cuenta con mil 144 fincas antiguas, de las cuales 526 pertenecen a la capital, mismas que están registradas ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que se encarga de preservar fincas que datan del año 1526 a 1900.
El titular del INAH, el licenciado Humberto Carrillo Ruvalcaba, informa, sin ser precisa la cantidad, que sí hay registro de fincas en riesgo de derrumbe o colapso, sin embargo para prevenir este tipo de situaciones, es el propio INAH el que se acerca a propietarios de estas fincas a fin de guiarlos en este proceso, mientras que en otras ocasiones son los propietarios los que se acercan al instituto para ser orientados sobre los cuidados.
Igualmente, el instituto tiene acercamiento con Protección Civil, que es quien puede dar aviso sobre estos riesgos en Aguascalientes.
“Aquí tenemos tres arquitectos en históricos y restauradoras, entonces lo que hacemos es hacer brigadas para ir a concientizar a los dueños de los inmuebles, ya que les decimos que con todo gusto el instituto. Con una mudada por la asesoría tenemos una ventanilla abierta al público y aquí hacen el trámite, pues vienen a solicitar algunos propietarios de fincas viejas, para efectos de que les digamos cómo restaurar, cómo pintar o qué elementos pueden ellos llegar a sustituir. Entonces como instituto y a mí como director que me da mucho satisfacción ver que se conserve que y que embellezcan Aguascalientes”.
Si una finca sufre un colapso y en ella se encuentran piezas de importancia histórica el área de Arqueología se encarga de resguardar y estudiar estos materiales.
El titular del INAH, comparte que el instituto junto con la Secretaría de Obras Públicas Municipales llevan colaboración con el programa “Restaurando tu fachada” destinada a la preservación de estas fincas históricas.
Por su parte, el subdirector del INAH, Christian Medina, informa que para considerar una finca como histórica, es necesario que cuente con al menos dos de los tres elementos esenciales: antigüedad, materiales e importancia.
“Deben de estar dentro del siglo XIX, lo que determina la Ley de Monumentos históricos que rige a nuestro país segundo bueno, que sean elementos de arquitectura vernácula dignos de ser rescatados. Estos pueden ser adobe, la cal, el tipo de pintura con el que estén decorados en su interior y el tercero, la importancia histórica que puedan tener es decir, hay algunas fincas que aparte de su antigüedad o de los elementos con las que fueron construidas, pues fueron escenarios de momentos históricos”.
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