Amexhi pide a Sheinbaum retomar asociaciones público-privadas para impulsar la industria petrolera
La Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi) solicitó este lunes a Claudia Sheinbaum, próxima presidenta de México, reactivar las asociaciones público-privadas con el objetivo de desarrollar más yacimientos petroleros, especialmente en áreas no convencionales, aumentar la producción de gas natural y generar beneficios económicos que podrían ascender a casi 160,000 millones de dólares.
En la presentación del documento titulado "2030, México en crecimiento: Propuestas del sector de hidrocarburos para aprovechar el potencial energético de México en favor de sus ciudadanos", Alberto de la Fuente, presidente de Amexhi, destacó tres objetivos principales. El primero es garantizar la suficiencia presupuestal del Estado mexicano para enfrentar las demandas de un crecimiento poblacional estimado en un millón de habitantes adicionales cada año, así como para asegurar la continuidad de los programas sociales y el pago de la deuda pública.
El segundo objetivo es promover el desarrollo sustentable del sector energético, posicionándolo como un motor para la transición energética y la descarbonización de la industria eléctrica. Finalmente, la asociación busca incrementar la seguridad energética del país. De la Fuente subrayó que asegurar el suministro eléctrico permitirá a México mantener la competitividad de su industria y su dinamismo económico, además de capitalizar las oportunidades que surgen con el fenómeno del nearshoring, o la relocalización de empresas en Norteamérica.
Para alcanzar estos objetivos, Amexhi promueve un diálogo cercano con el equipo de Sheinbaum, quien asumirá la presidencia el 1 de octubre. "Este documento busca ser un diagnóstico, una propuesta y también un punto de partida para una colaboración estrecha con el gobierno de la doctora Claudia Sheinbaum", expresó De la Fuente.
La asociación también pidió al gobierno asignar el 53% de los recursos prospectivos que aún no cuentan con un operador asignado, los cuales son en su mayoría pozos no convencionales. Merlin Cochran, director general de Amexhi, explicó que se busca que empresas privadas asuman el riesgo financiero que implican estos pozos, los cuales son más complejos y tienen una menor duración de explotación, permitiendo así que el gobierno y Petróleos Mexicanos (Pemex) concentren sus esfuerzos en pozos convencionales y más rentables.
En cuanto a la seguridad energética, De la Fuente destacó que México importa el 75% del gas natural que consume, principalmente de Estados Unidos, donde el 85% de este recurso proviene de campos no convencionales. Aunque este gas es actualmente el más barato a nivel mundial, los riesgos globales evidencian la necesidad de incrementar la producción nacional para evitar posibles interrupciones en las cadenas de suministro.
Por ello, Amexhi también propuso revisar la actual política nacional que prohíbe la fracturación hidráulica, o fracking, con el fin de aumentar la producción de petróleo y, en especial, de gas natural.
Según las estimaciones de Amexhi, estas recomendaciones, junto con otras ocho propuestas contenidas en el documento, podrían generar beneficios al Estado mexicano por cerca de 160,000 millones de dólares: 104,000 millones en contraprestaciones y 56,000 millones en inversiones en proveeduría nacional. Estos recursos serían equivalentes a ocho veces el gasto anual de los programas sociales del gobierno y permitirían pagar la deuda actual de Pemex.
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