A pesar del superpeso, México sigue con gasolinas caras
La buena racha que ha registrado el peso mexicano y que los petroprecios del petróleo a nivel internacional están a la baja México no ha sido suficiente para tener una gasolina barata en el país, destaca el académico y asesor financiero Gerardo Sánchez.
Esto se debe en gran parte a los impuestos que representan aproximadamente el 40% del precio total de cada litro de gasolina que se paga.
México, que importa alrededor del 60% de la gasolina que se consume diariamente en el país, ha experimentado una notable depreciación del tipo de cambio, llegando casi a los 17 pesos por dólar estadounidense. Además, los petroprecios del petróleo mexicano han oscilado entre los 60 y 64 dólares por barril en los últimos meses.
A pesar de la relativa asequibilidad de la gasolina en comparación con otros países del continente, como Uruguay y Chile, México aún se sitúa como el tercer país con los precios más altos. Llenar un tanque de gasolina en México cuesta el doble que en países como Colombia o Ecuador, y, si se compara con algunas gasolineras de Texas, la gasolina en México resulta un 60% más cara.
Reducir la carga impositiva sobre la gasolina se perfila como una solución que permitiría hacer valer el beneficio de importar la mayoría del combustible que se consume en el país, destaca el especialista.