Sepultan a los 6 adolescentes asesinados en Zacatecas
Las familias se despiden con gran dolor de los jóvenes zacatecanos que fueron secuestrados el domingo y encontrados sin vida el pasado miércoles en un predio de la comunidad de Malpaso, Villanueva. Entre el dolor las familias comparten que ya no se sienten seguros y que las autoridades pudieron hacer más.
Durante la madrugada del día jueves, se les fue entregado los cuerpos a su respectivas familias para que se les diera sepultura, después de que concluyeron los procedimientos de necropsia, para identificar a cada uno de ellos.
Cada una de las familias despidió a sus jóvenes en sus respectivas comunidades, pero compartiendo el mismo dolor. Malpaso, Colonia Felipe ángeles y Presa de Maravillas, comunidades del municipio de Villanueva, fueron los lugares donde se llevaron la mayoría de los sepelios y solo a dos jóvenes se les realizó su funeral en la capital del estado.
En la comunidad de Felipe Ángeles, se despidió al joven Jesús Manuel Rodríguez Robles, de tan solo 17 años. Quien fue recibido por toda su comunidad y familia, quienes entre el llanto compartieron que tenía tan solo unos meses en la ciudad de Zacatecas, donde por la inseguridad le arrebataron sus sueños.
“No merecía morir de esta manera tan cruel, ni torturado”, declara uno de sus primos, quien encabezaba el cortejo fúnebre que recorrió las calles hasta el panteón. Además de que la comunidad menciona que a pesar de la inseguridad que se vivía hace años, es ahora cuando se percibe más el miedo.
“Si las autoridades se hubieran movido de inmediato y usado todo el equipo desde el primer minuto, tal vez los hubieran encontrado con vida” miembro de la comunidad que solicitó el anonimato por seguridad.
Por su parte, en Malpaso, se dio sepultura a los jóvenes Diego Rodrigo Vidales Valenzuela y Óscar Ernesto Rojas Alvarado, ambos de 17 años y quienes eran grandes amigos. A unos cuantos kilómetros, en la comunidad de Presa de Maravillas, sé efectiva el velorio de Gumaro Santa Cruz Carillo, quien será sepultado el día viernes.
Finalmente, en la capital de Zacatecas se despidieron con gran dolor las familias de Alberto René Ocón Acevedo y Héctor Alejandro Saucedo Acevedo, de 14 y 17 años, respectivamente, quienes además eran primos.
Por otro lado, las autoridades siguen informando que la salud del único sobreviviente sigue siendo estable, pero continúa bajo atención médica.
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