Denuncia Bernardo Arévalo plan de "golpe de Estado" para evitar que asuma en Guatemala
El socialdemócrata Bernardo Arévalo, presidente electo de Guatemala, denunció este 1 de septiembre la existencia de un plan de "golpe de Estado" para imposibilitar que asuma el poder en enero de 2024, luego de ganar el balotaje del 20 de agosto, después de que suspendieran a su partido, Movimiento Semilla, después de las elecciones presidenciales del pasado 20 de agosto.
"Existe un grupo de políticos y funcionarios corruptos que se niegan a aceptar este resultado (del balotaje) y ha puesto en marcha un plan para romper el orden constitucional y violentar la democracia", refirió Arévalo cuatro días más tarde de que la justicia inhabilitara a Movimiento Semilla. "Estamos viendo un golpe de Estado en curso", añadió durante una rueda de prensa.
En su declaración, Arévalo acusó a dicho grupo de actores de emprender un plan destinado a romper el orden constitucional y atentar contra la democracia. El mandatario electo refirió que estas acciones parecen estar apoyadas por instituciones que, en teoría, deberían garantizar la justicia en Guatemala, y mencionó a Consuelo Porras, fiscal general, como una de las figuras implicadas.
Asimismo, Arévalo responsabilizó a Rafael Curruchiche, jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI); a Fredy Orellana, juez séptimo de Instancia Penal; y a la Junta Directiva del Congreso de la República de estar involucrados en esta presunta trama.
El presidente electo advirtió acerca de la continuidad de un supuesto golpe de Estado en desarrollo, en el que el sistema judicial se estaría empleando para socavar la justicia y anular la voluntad popular expresada libremente en las urnas el pasado 20 de agosto.