Después de casi 20 años, ejecutan a una mujer en Singapur
La mañana de este viernes se informó la ejecución de una mujer condenada por el tráfico de más de 30 gramos de heroína, dentro del complejo penitenciario de Changi, en Singapur.
La Oficina Central de Narcóticos (CNB) emitió el comunicado donde Saridewi Djamani, singapurense de 45 años, fue ahorcada luego de su sentencia a la pena de muerte en 2018 al ser culpable de posesión de 31 gramos de heroína y diamorfina con fines de tráfico.
“Saridewi recibió el debido proceso conforme a la ley y estuvo representada por un abogado durante todo el proceso”, agregó la oficina, reafirmando que las leyes de Singapur permiten la pena de muerte por tráfico de más de 15 gramos de heroína.
Desde el caso de la peluquera Yen May Woen, quien fue condenada en 2004 por tráfico de drogas, han pasado casi dos décadas para que ahora Saridewi fuera ahorcada por el mismo delito.
Las leyes en Singapur dictan que cualquier persona que sea sorprendida traficando, importando o exportando drogas ilegales (metanfetamina, heroína, cocaína, marihuana o cualquier derivado de ella) sera acreedota de la pena de muerte.
“La pena capital se usa solo para los delitos más graves, como el tráfico de cantidades significativas de drogas que causan daños muy graves, no solo a los drogadictos individuales, sino también a sus familias y a la sociedad en general”, dijo el CNB.