Detienen por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito a hijo de Gustavo Petro

Nicolás Petro, hijo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, fue detenido como parte de una investigación por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, informa la oficina del fiscal general.

El joven Petro, político de la provincia de Atlántico, habría aceptado la investigación desde que se inició en marzo, y previamente había negado con vehemencia las acusaciones que lo vinculaban con el dinero proveniente de narcotraficantes a cambio de incluirlos en los esfuerzos de paz liderados por su padre.

La exesposa de Nicolás, Daysuris del Carmen Vásquez, también fue arrestada en relación con el caso.

A principios de este año, Vásquez había afirmado a medios locales que dos personas implicadas en el narcotráfico habían entregado dinero a Nicolás para financiar la campaña de su padre, entre otras presuntas acciones de corrupción.

Gustavo Petro, a través de la plataforma "X" (anteriormente conocida como Twitter), expresa su dolor por la situación de su hijo y destaca que la Fiscalía General de la República actuaba conforme a la ley. 

"A mi hijo le deseo suerte y fuerza. Que estos sucesos forjen su carácter y pueda reflexionar sobre sus propios errores", declara el mandatario. Además, reafirma su compromiso de no intervenir ni presionar las decisiones judiciales, enfatizando que el derecho debe guiar libremente el proceso.

El presidente Petro, desde su llegada al cargo, se comprometió a buscar acuerdos de paz y rendición con grupos rebeldes y bandas criminales para poner fin al conflicto interno de 60 años que ha cobrado la vida de 450 mil personas en Colombia. Durante su primer año en el cargo, estos esfuerzos han tenido resultados mixtos.

Por un lado, las negociaciones con el grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) se reactivaron y se llegó a un acuerdo de alto el fuego que entrará en vigencia en agosto. Sin embargo, los intentos de mantener conversaciones con la principal banda criminal del país, el Clan del Golfo, fracasaron debido a la continua violencia. Además, una propuesta de ley para regular las entregas de grupos criminales, que otorgaría sentencias más bajas a cambio de información y trabajo restaurativo, ha sido objeto de duras críticas.