Matan a dos agentes de policía y un socorrista en Minnesota; el sospechoso es abatido
Un hombre con varias armas y gran cantidad de municiones abrió fuego el domingo contra policías desde una residencia en los suburbios de Minneapolis que estaba llena de niños, matando a dos agentes y a un bombero que brindaba asistencia médica a uno de los heridos, informaron las autoridades.
Un tercer policía resultó herido en el tiroteo, el cual ocurrió en un frondoso vecindario de viviendas de dos plantas en Burnsville, Minnesota. El sospechoso fue abatido, indicaron las autoridades.
El superintendente de la Oficina de Detención Penal de Minnesota, Drew Evans, dijo que hubo un intercambio de disparos en lo que calificó como un "día horrendo". Las autoridades aún están conjuntando los detalles, agregó.
El bombero, quien también trabajaba como paramédico, fue baleado mientras brindaba asistencia médica a un policía herido, señaló Evans. Dijo a los reporteros que el paramédico formaba parte de un escuadrón táctico SWAT que fue convocado al lugar en respuesta a un incidente doméstico en la vivienda.
En el interior, un hombre armado se había parapetado con su familia, incluidos siete niños cuyas edades van de los 2 a los 15 años, indicó Evans.
Señaló que las negociaciones se prolongaron durante varias horas hasta que el sospechoso comenzó a disparar. No especificó cuánto tiempo, pero la Asociación de Policía y Agentes de Paz de Minnesota dijo que el enfrentamiento duró cuatro horas antes de que el equipo SWAT ingresara a la residencia.
Evans añadió que el sospechoso tenía varias armas y gran cantidad de municiones consigo, y que les disparó a los agentes de policía desde distintos puntos de la casa, incluidos el nivel superior e inferior. Evans aclaró que al menos uno de los policías fue baleado dentro de la vivienda.
"Aún no sabemos con exactitud sobre el intercambio de disparos que ocurrió", comentó Evans. "Ciertamente que varios agentes respondieron el fuego".
Señaló que el sospechoso fue localizado sin vida alrededor de las 8 de la mañana y que la familia y los niños pudieron abandonar la residencia. Ninguno de ellos resultó herido.
Las autoridades de la ciudad identificaron a los agentes abatidos como Paul Elmstrand y Matthew Ruge, ambos de 27 años. Adam Finseth, un bombero y paramédico de 40 años, también perdió la vida. Había trabajado para la ciudad desde 2019.
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