Perito informa que Octavio Ocaña fue sometido y ejecutado
Un peritaje independiente sobre la muerte de Octavio Ocaña, ocurrida en octubre de 2021, determinó que el actor no se suicidó ni manipuló un arma de fuego, contrario a la versión difundida por la Fiscalía del Estado de México y es que se detalla que el joven habría recibido un disparo de un arma superior al calibre .380 cuando se encontraba acostado sobre la carpeta asfáltica.
Según las conclusiones del criminalista Mauricio Reséndiz, a petición de la familia, y de las que el medio MILENIO tiene copia, se encontraron contradicciones con la versión que se había dado a conocer.
El peritaje revela que “no existen indicios de huellas en el arma calibre .380 sin número de identificación, que determine el uso, tenencia y manipulación por parte del occiso”.
Además, no hay “producción e intercambio de indicios de carácter químico”, como plomo, bario o antimonio que establezcan que Ocaña accionó algún arma el día de su muerte. Por lo que en el estudio, elaborado con actas médicas, dictámenes periciales, inspecciones, entrevistas e indicios recabados en la carpeta de investigación, se concluye que “no realizó ninguna acción tendiente al suicidio”, publica el medio.
Sobre las marcas del lado del conductor de la camioneta de Ocaña, se concluye que “no corresponden a un disparo de un arma de fuego calibre .380”, y de acuerdo con las características de la lesión, “se puede concluir que la lesión es de un calibre superior”.
Finalmente, cuestiona la mecánica de hechos aportada por el perito Juan Carlos Piña la cual, no sería “coincidente con los indicios producidos dentro del vehículo en el que viajaba”, y se determina que el actor habría sido prácticamente “ejecutado”.
Se explica que Ocaña, de 22 años al momento de su muerte, “es lesionado por un proyectil disparado al exterior del vehículo cuando se encontraba en posición decúbito ventral con su cabeza lateralizada hacia la derecha y sobre un costado de la carpeta asfáltica”. Según este informe, tras el impacto de la camioneta, Ocaña fue obligado a bajar, ubicándolo boca abajo con la cabeza hacia el lado derecho sobre la carpeta asfáltica durante maniobras de aseguramiento por parte de los policías, momento en el cual una persona dispara a una distancia mayor a un metro hacia el cráneo del ahora occiso.
De acuerdo con un comunicado de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, que publicó en redes sociales a pocos días del fallecimiento del joven, iba acompañado de dos personas en su camioneta, mismas que fueron detenidas para recabar testimonios y quienes declararon que el actor portaba un arma, la cual estaba guardada en la guantera del auto. “En las inspecciones realizadas a la camioneta donde viajaba la persona que perdió la vida, y dos sujetos más, fue encontrada un arma de fuego, un casquillo percutido e indicios balísticos en el techo de la unidad, justo a altura del conductor”, se lee en el comunicado.
Se agregó que las personas que acompañaban a Ocaña declararon que desde hace unos días el actor había estado consumiendo alcohol y que mientras transitaba por calles del Cuautitlán Izcalli, policías le pidieron que se detuviera, pero no hizo caso y se desató una persecución.
Agregó que los testigos afirmaron que en la persecución Octavio Ocaña sacó el arma y que perdió el control de la camioneta, que terminó chocando a un costado de la vía por la que circulaba y negaron que hubiera un intercambio de disparos entre los policías y el actor. No obstante, el actor tenía una herida de bala en la cabeza y se halló "un casquillo percutido e indicios balísticos en el techo de la unidad, justo a altura del conductor".
Con información de: Milenio