Por falta de agua, en riesgo de cerrar el Canal de Panamá
El Canal de Panamá enfrenta una situación crítica debido a la disminución de las lluvias provocada por el cambio climático y el fenómeno de El Niño. Preocupa a las autoridades la posibilidad de que la vía se seque, lo que afectaría gravemente el comercio marítimo mundial que representa casi el 6% del total.
Ricaurte Vásquez, administrador del Canal, señala que una desventaja clave del Canal de Panamá en comparación con otras rutas marítimas, como el Canal de Suez, es el hecho de que opera con agua dulce en lugar de agua de mar.
Debido a la escasez de lluvias, se ha restringido el calado de los buques, lo que se traducirá en una pérdida de 200 millones de dólares en ingresos para el año 2024. Para el año actual, se estima que los ingresos alcancen los 4,900 millones de dólares.
Ante esta situación, Vásquez subrayó la necesidad de encontrar soluciones para mantener su relevancia como ruta para el comercio internacional y evitar el declive del Canal. Las restricciones en el calado han llevado a que un menor número de buques crucen diariamente, lo que ha obligado a algunos mercantes a descargar y volver a cargar sus contenedores en puertos distintos, utilizando el ferrocarril para cruzar el Canal.
Aunque la situación es alarmante, el Canal de Panamá ha descartado la opción de utilizar agua de mar debido a las complicaciones y los altos costos que implicaría. La falta de adaptación a esta crisis podría llevar a la pérdida de clientes, ya que las navieras podrían optar por rutas alternativas.
En resumen, la situación del Canal de Panamá es delicada, y las autoridades están trabajando para encontrar soluciones que le permitan mantenerse relevante y operativo frente a los desafíos impuestos por el cambio climático y la disminución de las lluvias.