Alcoholismo y juventud

La principal adicción en el mundo es el alcoholismo. No se trata de un vicio, es una enfermedad que deteriora la salud física y mental y que, debido a la adopción de actitudes inconscientes y violentas que ponen en riesgo la estabilidad familiar, laboral y social de las y los consumidores de alcohol, impacta gravemente el entorno de las víctimas de la ingesta de esta sustancia psicoactiva. 

El alcoholismo no solo está vinculado a más de doscientos trastornos de salud tales como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, hepáticas y traumatismos, sino que además es la causa de muerte en 3 de cada 10 accidentes de tránsito.

Este grave problema de salud pública global afecta, cada vez más, a menores de edad; según La Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco en nuestro país 4 de cada 10 adolescentes de secundaria y 5 de cada 10 jóvenes de preparatoria son ya consumidores de alcohol y según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición el 68% de adolescentes ha consumido alcohol alguna vez en su vida y 1 de cada 5 lo consume de manera excesiva.

Ante este trágico escenario el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para quien la atención a la juventud ha sido una acción prioritaria de su gobierno, ha instruido a las secretarías de Salud y de Educación Pública coordinarse para implementar la “Estrategia Nacional para la Prevención de Adicciones” la cual pretende, con el apoyo de la comunidad educativa y la sociedad en general, evitar la ingesta de drogas legales e ilegales.

La maestra Leticia Ramírez Amaya, secretaria de Educación, ha gestionado la implementación de la estrategia en el aula no solo revisando los materiales didácticos, sino reuniéndose con autoridades federales y estatales, de instituciones públicas, autónomas y particulares de educación básica y media superior, para que el próximo lunes 17 de abril, fecha en que, niñas, niños, adolescentes y jóvenes retornan a las aulas, comience la cruzada preventiva de información, sensibilización y concientización que nos permita alejar a la niñez y a la juventud de la terrible amenaza de las adicciones.
 
El esfuerzo de docentes en el aula, deberá ser reforzado en familia por tutores, madres y padres de familia, el amor es el sentimiento más valioso que nos permitirá preservar la integridad de las nuevas generaciones en beneficio colectivo de la humanidad.

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