La doble batalla de las mujeres periodistas

En la actualidad, el periodismo se encuentra en un momento de transformación y evolución constante, y las mujeres tienen un papel crucial en este proceso. Sin embargo, a pesar de los avances que se han logrado en materia de igualdad, todavía existen muchos retos que las mujeres enfrentan en el campo del periodismo.

Uno de los principales desafíos que enfrentan las mujeres en el periodismo es la falta de representación en los medios de comunicación, a pesar de que las mujeres constituyen más de la mitad de la población mundial, todavía se encuentran subrepresentadas no solo en los medios de comunicación sino en los puestos de liderazgo de los mismos; Aguascalientes forma parte de la crítica estadística, hace algunos meses fui invitada a una reunión de directores de medios, así como directores de redacciones periodísticas, en una sala con más de una veintena de hombres, sólo nos encontramos de frente dos mujeres, -comenté mi primera observación con mi colega Irma Ramírez Guzmán, Directora Gerente del diario El Heraldo; en contraparte, sin miedo a equivocarme, en Aguascalientes hay más mujeres reporteras, redactoras y trabajadoras de medios, lo cual me hace creer que la capacidad, la experiencia y la responsabilidad son aún insuficientes para que las mujeres sean consideradas en puestos de liderazgo, un peso más en la profesión con la que muchas soñamos desde siempre.

Hace unos días escuchaba un foro internacional de mujeres periodistas destacadas en Latinoamérica, quienes respondieron a la pregunta de ¿Qué habrían hecho diferente si tuvieran la posibilidad de volver atrás en sus carreras? Una de ellas señaló que le habría gustado tener más hijos, pues con el nacimiento de su primer y único hijo fue advertida de que no podría continuar en esta profesión con más responsabilidades, pues el periodismo es un trabajo de tiempo completo, tras convertirse en madre, su compañero, con quien competía por el cargo, obtuvo el nombramiento de jefe editorial; creo firmemente que ninguna mujer debería sentirse obligada a cambiar el rumbo de su vida personal en el intento por ser competitiva frente a un hombre cuyas responsabilidades personales, son visiblemente distintas.

Otro de los retos sin duda es el acoso que se vive en muchos aspectos, las mujeres en la mayoría de los ámbitos profesionales, son señaladas por lograr asensos demeritando su esfuerzo y capacidad, este señalamiento que constituye un tipo de violencia se da aún más en los medios de comunicación, en donde las mujeres periodistas son especialmente vulnerables a este tipo de ataques ya sea cuando se logra superar un peldaño en la carrera profesional e incluso cuando se tiene información exclusiva e incómoda.

Un desafío más al que se enfrentan las mujeres en el periodismo es el acoso y la violencia en línea; a medida que la tecnología ha avanzado, también lo han hecho las formas en que las personas pueden acosar y atacar a los demás públicamente y a veces disfrazados de perfiles falsos a través de las redes sociales. Las mujeres periodistas son especialmente vulnerables a este tipo de acoso, lo que genera un impacto muy negativo no solo en su salud mental sino que alcanza la inseguridad y miedo al realizar su trabajo. Este tipo de ataques no solo afectan a las mujeres periodistas individualmente, sino que también tienen un impacto en toda la sociedad. 

La deuda con las mujeres, aún es grande en los medios de comunicación donde se requiere un compromiso serio y con base en capacidades; se adeuda en la equidad en las redacciones y en asegurarse de que las voces y las perspectivas de las mujeres siempre estén representadas en la cobertura de noticias.

Hoy puedo decir que me siento orgullosa de pertenecer y representar a una empresa que ha logrado crecer y avanzar tanto en esta igualdad tan anhelada, aquí no hay ley que obligue a una cuota o a la paridad, y aún así, hay una mayoría de mujeres a quienes no se les consideró por su género sino por su formación y habilidades que las hacen indispensables en cada función que realizan.

Las mujeres hemos trabajado duro para demostrar que nuestra capacidad es más que suficiente, hemos logrado abrir caminos empantanados durante muchos años, hemos construido y avanzado en nuestras carreras y aunque los retos que enfrentan las mujeres en el periodismo son significativos y complejos, no son insuperables.

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