Ofrecían en prostitución a sus hijas a los albañiles para poder comprar droga
Luego de más de un año de investigación, finalmente la FGE logró obtener de un Juez la orden de aprehensión en contra de una pareja de adictos a las drogas, que ofrecían a sus menores hijas en prostitución para tener dinero y pagar su adicción.
La misma investigación revela que la pareja también obligaba a las menores a participar de los encuentros sexuales que ellos sostenían y se tiene documentado que en algunas ocasiones llegaron a drogarlas.
Los detenidos responden a los nombres de JONATHAN y de YESENIA ESMERALDA quienes enfrentan los cargos de VIOLACIÓN EQUIPARADA, CORRUPCIÓN DE MENORES E INCAPACES, TRATA DE PERSONAS y VIOLENCIA FAMILIAR.
En el caso del Jonathan fue detenido en un Anexo ubicado en el Palomino Dena y en donde llevaba 8 meses de proceso de desintoxicación y en el caso de Yesenia, fue detenida en su lugar de trabajo en la Colonia López Portillo, pero también estuvo en un Anexo por sus problemas de adicción
Actualmente se encuentran en el CERESO y un Juez le ha dictado el auto de vinculación a proceso por dicho delito. Les impuso la medida cautelar de Prisión Preventiva Justificada y fijó un plazo de 4 meses y 15 días para el cierre de la investigación complementaria.
Los hechos que hoy los tienen tras las rejas ocurrieron hace aproximadamente un año en la Comunidad de Los Negritos que pertenecen al Municipio de Aguascalientes, sin embargo fue complicado para la FGE el poder acreditar los delitos y por ello tardaron casi un año en llevarlos ante un Juez.
Es importante mencionar que en este último año, las niñas ya no estaban con sus papás y fueron resguardadas en Casa DIF.
La investigación revela que la desesperación por conseguir dinero para drogarse, llevó a la pareja a ofrecer a sus hijas a varias personas, entre ellos albañiles para que estos pagaran por los encuentros y los adultos pudieran comprar su droga.
Pero también se sabe que los propios padres abusaban de las menores y las obligaban a participar de los encuentros sexuales que como pareja sostenían, e incluso en algunas ocasiones las llegaron a drogar, lo que constituye el delito de corrupción de menores, violación y violación equiparada.
Cuando las autoridades intervinieron, les quitaron a las niñas pero no pudieron llevar a juicio a los padres. Estos pensaron que si demostraban que habían superado la adicción podrían recuperar a las menores y por ello se anexaron, sin embargo, la FGE siguió con su proceso de investigación hasta que pudo acreditar los delitos.