¡Déjenlos en paz!

Elegir gobernantes es un tema de ciudadanos, es un tema del cuerpo electoral, es un tema del pueblo.

¡Déjenlos en paz!

Dejemos que el pueblo decida con autonomía y libertad. Que el ciudadano se erija como la majestad electoral que es. 

No permitamos ese ruido de las encuestas, de los entusiastas, de los mentirosos, de los agoreros, de los adivinos del futuro, no lo permitamos.

Acudamos a las urnas con absoluta libertad y autonomía. Elegir gobernantes es un tema de ciudadanos, no de encuestadores. La participación ciudadana en un proceso electoral es para garantizar que los líderes electos reflejen valores y las necesidades de la sociedad, y que estos, tengan la exigencia ciudadana de que se comporten con virtudes.

La ciudadanía, el cuerpo electoral, tiene el poder de influir en el rumbo del país mediante su voto. Al emitir su voto, cuando transforman la boleta en voto, los ciudadanos expresan su preferencia y contribuyen a la formación de un gobierno representativo. 

Ciudadanas y ciudadanos, además, son la participación activa en los debates, en el diálogo ciudadano, en la búsqueda de información de las y los candidatos, a las propuestas políticas que son ejes esencial de el por qué y por quién votar.

Nos han dado más denostación, más basurero que proyectos sólidos, estoy de acuerdo, pero en la evaluación ciudadana es en función de quienes le han cumplido y quienes no le han cumplido, de quienes respetan a la ciudadanía y quienes le faltan al respeto todos los días a la sociedad y a sus integrantes. 

Es importante que los ciudadanos se involucren en un proceso electoral, pero también es fundamental que se respete el derecho a hacerlo sin presiones, sin intimidaciones, ¿que hay miedo?, pues hagamos del miedo un arma ciudadana para ir a las urnas con valentía con honradez y con un gran sentido cívico en favor de nuestra patria. 

La libertad de elegir es un pilar fundamental de la democracia y debemos asegurarnos de que todos tengan la oportunidad de expresar su opinión sin temores. 

En resumen, la elección de gobernantes es un tema de ciudadanas y de ciudadanos, de nadie más. Nadie puede apropiarse de la capacidad de elegir, mil ciudadanos o ciudadanos integrantes de una muestra representativa no son la voluntad del pueblo de México. 

Fomentemos un ambiente donde cada persona pueda ejercer su derecho al voto de manera libre, autónoma, consciente. Esa es la responsabilidad democrática.

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