El fracaso económico de México

Cuando vemos en México el avance de la concentración del poder, no podemos más que referirnos a lo que se ha estudiado a lo largo de la historia.

Siempre se ha dicho o se ha sostenido que para lograr las mejores condiciones de bienestar social masivo, hay que, necesariamente, en cualquier momento histórico, pensar en que la proposición que ha de hacerse implica justificadamente las mejores condiciones autoritarias de concentración del poder, es decir que lograr el desarrollo social sostenido de un país implica necesariamente que se concentre el poder aunque esa concentración pueda finalmente tener tintes antidemocráticos.

Esta manera de verla con la necesidad de cumplir las metas sociales olvida, por supuesto, que las metas de desarrollo social son independientes de las metas políticas, es decir que el desarrollo social no necesariamente está ligada a la meta política de los grupos de interés o partidos políticos que las persiguen, es decir, se requiere por supuesto tener estrategias idóneas para la adquisición del desarrollo y su distribución entre los que menos tienen, pero no necesariamente esa decisión tiene un carácter absolutamente político, es decir, debe haber estrategias adecuadas, pero no necesariamente con ideologías o “ideologizadas” como dicen algunos autores. Así entonces se dice que los fines del desarrollo social se dan con independencia de la política.

Si las estrategias empleadas son adecuadas, los procesos de desarrollo social serán rectilíneos y uniformes y no se tendrán que dar bandazos tratando de mezclar la política, los intereses de grupo, los intereses personales, con los intereses del desarrollo social en beneficio de todos los habitantes del país y ¿por qué es necesario recordar estas ideas? Bueno, por un lado, vemos con suma preocupación cómo el desarrollo social está politizado en México, cómo se piensa que acusando y denostando al adversario se avanza en el desarrollo social o cómo se busca ahora, nuevamente, restablecer en México la economía centrada en una decisión del Gobierno, es decir una economía centralizada en el gobierno, como lo bastamos viendo ahora que el presidente de la República se plantea hacer la adquisición del grupo Citibanamex, después de que el Grupo México de Larrea se desistiera de esa adquisición justamente por la falta de certidumbre jurídica ocasionada con una toma ilegal de sus instalaciones. ¿Cómo resolver ese problema de incertidumbre e ilegalidad? Pues concentrando más poder ahora queriendo adquirir Citibanamex. Esa receta en el pasado han mostrado que han fracasado y me parece que México va por un derrotero de fracaso en su política social y de fracaso en su política económica.

Las ideas aquí expresadas pertenecen solo a su autor, binoticias.com las incluye en apoyo a la libertad de expresión

Imagen

Jorge Manuel Aguirre
Sección

Keywords

Jorge Manuel Aguirre, opinión, columnista BI

Balazo

En la opinión de

Título SEO

El fracaso económico de México

Editor Redacción

Activado

Retuitear Nota

Desactivado