Una fuerza que debemos impulsar
Los jóvenes no son meros beneficiarios pasivos de programas y políticas, sino agentes activos de su propio desarrollo
A veces, cuando llego a casa después de una intensa jornada de trabajo, a las nueve o diez de la noche, lo único que quiero hacer es desconectarme un ratito de todo y avanzar en la novela que esté leyendo o ponerme a ver alguna serie en la televisión.