Podría ser fuego amigo: Arturo Ávila sobre señalamientos en su contra

Luego de responder a una serie de acusaciones vertidas en su contra con respecto a contratos millonarios y controvertidas sociedades, el diputado aguascalentense y vocero de la bancada de Morena en el Congreso de la Unión, Arturo Ávila Anaya, considera que se trata de un golpeteo político que podría provenir de sus adversarios.

En ese sentido, el diputado puntualiza que bien podría tratarse de adversarios de oposición, pero también podrían ser consignas provenientes de su propio partido a través de grupos con los que se han manifestado diferencias de forma en cuanto al proyecto de Morena para la entidad, sobre todo, enfatiza, viéndose en él una fuerte y clara opción política de manera local.

«En Aguascalientes, me parece que es dolosa, me parece que es promovida por algunos adversarios políticos que incluso puede llegar a ser parte de mi mismo movimiento, lo entiendo, he crecido mucho, he hecho un buen papel como vocero del grupo parlamentario de Morena, como diputado federal. Hace mucho que no se veía a un diputado federal de nuestra tierra tan activo, tan echado para adelante, defendiendo a la presidenta Claudia Sheinbaum, defendiendo las reformas constitucionales.. y eso, pues genera un encono, primero de miedo pues la gente me ve como un fuerte aspirante para muchas cosas en el futuro, y es normal, es la guerra sucia», indica Ávila Anaya. 

Y si bien el diputado señala que el objetivo de unidad en Aguascalientes es claro para el partido Morena, primero es necesario consolidar aquellos acuerdos que ya se habían dado al interior del partido para que exista reciprocidad y entendimiento, cosa que, reconoce, no está sucediendo al momento.

«Pues mira, ojalá tuviéramos unidad. Nosotros siempre hemos promovido la unidad en el movimiento. Cuando en 2022 gané la encuesta para ser candidato a gobernador y que el designio finalmente no me favoreció, dimos una muestra de que estábamos listos y ayudamos a la maestra Nora Ruvalcaba y salimos en unidad. Y en este sentido, nos da la impresión de que de pronto los acuerdos o los procesos internos a veces no tienen esa misma reciprocidad, y en esa lógica, pues hasta que no encontremos una reciprocidad y el cumplimiento de los compromisos, es difícil poder hacer acuerdos políticos», señala.

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