El juego del gato, o tres en línea, es uno de los pasatiempos más sencillos que existen. En él, dos jugadores intentan alinear sus marcas en una cuadrícula 3x3. La estrategia de acorralar a los críticos, como en el juego del gato, solo llevará a un país más dividido, menos democrático y con menos oportunidades de crecimiento y justicia para todos.
No podrán culpar al pasado ni a los neoliberales, ni al imperialismo si el país no crece, si no mejora la seguridad pública, la educación, la salud y la presencia de México en el mundo.
Tienen todo: ¿qué sigue?
En una sesión caótica dentro de una instalación deportiva, en la madrugada de este miércoles diputados de la 4T aprobaron en lo general la reforma constitucional.